La justa deportiva más futurista es la que se espera dentro de cuatro años, en la que veremos grandes avances tecnológicos que permitirán disfrutar de un gran espectáculo y lucir el mejor sello del país sede, Japón.
En 1964 se realizaron por primera vez los Juegos Olímpicos en Tokio, 56 años después, la capital japonesa se propone contar con su mejor tecnología para un evento deportivo de tal magnitud.
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El Primer Ministro del país, Shinzo Abe, se presentó en la ceremonia de clausura de Río 2016 disfrazado de Súper Mario, el legendario personaje creado por Nintendo. Además, el archipiélago asiático es famoso internacionalmente por sus avances tecnológicos, lo que refuerza la idea de una edición totalmente tecnológica y futurista.
Aldeas Robóticas
Este proyecto está pensado en los turistas que se alojen cerca de la villa olímpica. Ellos podrán recurrir a robots ayudantes, que les aconsejarán sobre la forma más conveniente de utilizar el transporte, así como la mejor alimentación y entretenimiento que Tokio tiene para ofrecerles.
Además, el gobierno japonés ya planea triplicar su presupuesto en robótica, lo que permitiría ver mayor participación de robots como concierges en hoteles y aeropuertos.
Taxis sin chofer y traductores portables
Por otra parte, la empresa japonesa Robot Taxi está desarrollando autos sin conductor que los visitantes abordarán para trasladarse entre los estadios, mientras que Panasonic trabaja en dispositivos de traducción portables, para mejorar la comunicación y convivencia entre gente que habla diferentes idiomas.
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Lluvia artificial de meteoritos
Como un sustituto para los juegos artificiales, una lluvia de meteoritos iluminará el cielo de los estadios. La empresa emergente ALE se encuentra trabajando en esta idea, que desean poner a prueba en 2018.
Esta tecnología se complementará con lo que vimos en Río 2016, donde destacó la presencia de realidad virtual, un sistema de pagos en línea y los dispositivos GPS que permitían hacer un mejor seguimiento de los deportistas.
