En inglés se le conoce como hangry a ese horrible sentimiento de enfado cuando no has comido durante mucho tiempo. La palabra resultó perfecta pues combina “angry” que se traduce como enojado y “hungry” que significa hambriento. Pues ahora, unos científicos de la Universidad de California del Norte hicieron una nueva investigación para saber qué ocurre emocionalmente cuando experimentamos este enojo por hambre. Si a ti te ha pasado, ¡tienes que leer esto!
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Anteriormente se sabía que la molestia que sentimos cuando tenemos hambre surge, en gran parte, por la falta de azúcar. Sin embargo, gracias a este nuevo estudio dirigido por la psicóloga Jennifer MacCormack, se confirmó que también influye el entorno en el que nos encontramos. Además de nuestra consciencia sobre el hambre.
Para realizar la investigación, el equipo experimentó con más de 400 estadounidenses. Así se les enseñaron diferentes imágenes; a algunos les mostraron primero las que inducían sentimientos positivos, a otros, neutras, y a otros las que generaban sentimientos negativos. Finalmente, les enseñaron una imagen ambigua y les preguntaron qué tan agradable o desagradable les resultaba. Asimismo, se les preguntó qué tan hambrientos se sentían en ese momento.
No fue sorpresa que entre más hambrientos estaban, más desagradable les parecía la imagen. Sin embargo, esto sólo ocurría cuando primero se les había enseñado una imagen que les había despertado un sentimiento negativo. Quienes vieron primero algo neutral o positivo, no entregaron los mismos resultados.
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Quizá te ha pasado que de pronto te enojas muchísimo con alguien y hasta te peleas, sólo para después darte cuenta de que estabas tan irritable porque hacía mucho no comías nada. Pues, de acuerdo al estudio, el peor estado de enojo por falta de alimento es cuando no te das cuenta de que tu irritabilidad se debe al hambre.
Además, en otra etapa se concluyó que entre menos concentrados en sus emociones estaban, los participantes se sentían peor respecto a los demás. Por otra parte, quienes pasaban tiempo pensando en sus emociones, no presentaron cambios de emociones repentinos, incluso cuando tenían hambre.
Según la investigación, cuando estamos hangry, nuestro nivel de estrés aumenta. Ahora, cada que sientas esa cosquillita en la panza llamada hambre, recurre a tu smartphone y pide Uber EATS con los megas de tu Paquete Telcel y utiliza WhastApp ilimitado para invitar a tu bff a comer contigo. ¡Así nadie saldrá lastimado!