Cuatro tips para trabajar desde casa sin fracasar en el intento

Trabajar desde casa es cada vez más común en nuestro país, pues gracias a la tecnología se evitan gastos de transporte, se rompe con la rigidez de los horarios de oficina, se disminuye el tráfico en la ciudad, la salud de las personas mejora, así como el medio ambiente.

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De acuerdo con un artículo de Expansión, algunas empresas mexicanas estimulan el trabajo desde casa porque reduce sus costos. Además, laborar lejos de la oficina incrementa el bienestar de los empleados y mejora la productividad.

Si tú eres una de estas personas, te damos algunos consejos para que le saques un mayor provecho a esta forma de trabajo.

Planifica

La planificación es fundamental y no te toma mucho tiempo hacerlo. Llevar una agenda es de mucha ayuda, organiza tu siguiente semana con anticipación. Revisa tu agenda para recordar los eventos que tienes programados y, si tienes horarios, también anótalos.

Checa lo que tienes que hacer el día siguiente al finalizar tu jornada, con esto crearás el hábito de actualizar tu agenda con las tareas que ya hiciste y de agregar las nuevas.

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Lista de tareas

Complementa tu agenda con una lista general de tus tareas, ya sean diarias o semanales. Puedes llevar una para tu vida personal y otra para tu trabajo, de esta forma podrás designar un horario para atender a cada una sin mezclar tu atención.

Prepara tu lugar de trabajo

Estás en casa, así que hay miles de cosas que pueden distraer tu atención. Crea tu propio espacio dedicado al trabajo, asegúrate que esté libre de elementos distractores como la consola de videojuegos o la tele, así tu mente se acostumbrará a que es momento de concentrarse. Procura tener una buena temperatura e iluminación, al igual que música de fondo que te pueda ayudar.

Toma descansos

Si comienzas a abrumarte o pierdes la noción del tiempo, lo mejor es que tomes un descanso para despejarte. Utiliza la técnica Pomodoro, esta sugiere establecer periodos de trabajo de 25 minutos y luego realizar pausas.

Aprovecha este tiempo para levantarte un rato y dejar que tu cerebro se refresque. También es recomendable asignar momentos de desconexión de tus tareas laborales, en estos puede aprovechar para planificar tus actividades en tus días de descanso y hasta tus vacaciones.