Si escuchas “cachar y ponchar” y no lo relacionas con el béisbol, estos datos te van a salvar de más de un oso. Ahora que veas un partido de los Diablos Rojos, seguro te emocionas un montón y quién sabe: quizá hasta descubres a la comentarista de deportes que hay en ti.
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Empecemos con las cosas más básicas: se trata de dos equipos que se enfrentan y gana el que haga más carreras, que es cuando un bateador llega a la cuarta base (home). El equipo que pitcha (lanza) tiene que eliminar a tres bateadores del otro para dar por terminada la entrada, mientras que el que batea tiene que aprovechar su chance para sumar carreras.
Tres strikes para ponchar 😏
Para eliminar a un bateador hay que poncharlo, así de fácil. Esto puede pasar de tres maneras: que haga tres strikes, es decir, que no le pegue a una bola buena; la otra es que si le pega a la pelota, uno de los jugadores del otro equipo (jardineros) la cache antes de que caiga el suelo; la última es que si la pelota cayó al suelo, el jardinero tiene que aventarla a la base para que llegue antes de que el bateador o que alguien más lo toque con ella.
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Ahora, para hacer carreras, un bateador tiene que pegarle bien a la pelota y correr tan rápido como Forest de base a base hasta llegar al home, que es donde comenzó. Cuando hay un jugador en las primeras tres bases se le llama casa llena, aquí la esperanza es que al jugador que le toque batear le pegue fuerte a la pelota para hacer un jonrón, o sea, que saque la pelota del estadio, para que los cuatro corran libremente al home.
¡Y listo! Estas son las reglas básicas del béisbol y con ellas ya tienes todo para sentarte a disfrutar de un increíble partido. Sigue conectado a Hola Telcel para conocer más guías como ésta y recuerda: la práctica hace al maestro 😉
