Después de tres años de prototipos, los hermanos Echeverría por fin lograron crear y lanzar al mercado el Vulh 05, un auto de 625 kilogramos que cuenta con un motor Ford de 2 litros que genera hasta 285 caballos de fuerza.
El concepto de este superdeportivo salió a la luz en el 2013, siendo Stirling Moss -exconductor británico de Fórmula Uno- quien lo presentaría en el Club Real de Automovilismo en Londres. Una semana después, el mexicano Esteban Gutierrez lo condujo durante el Festival of Speed.
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La potencia del Vulh 05 fue inspirado en el Porsche 917 y el McLaren M8F, mientras que el diseño es más al estilo de los Can-Am de los 70s. “Sin puertas, sin techo, sin parabrisas, y una barra antivuelco expuesta. El reto era hacer funcionar la esencia de estos autos icónicos en un concepto contemporáneo sin que se viera como un retro”, comentó Iker Echeverría.
Una de las tareas principales de los hermanos en cuanto a la apariencia del Vulh 05 es que envejezca bien; es decir, que sean reconocidos por su simplicidad y estética con un extra de poder.
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Aunque este nuevo auto tiene alma mexicana, sólo el tubo que mantiene unidos todos los componentes es propio de la República, el 50 por ciento de los materiales son británicos, el motor es de Estados Unidos y partes del cuerpo provienen de Canadá. Además, fue diseñado con la ayuda de la reconocida firma italiana Esiste, la cual tiene entre sus clientes a Lamborghini y Maserati.
La empresa también ha anunciado una versión más potente del 05 conocida como 05 RR y espera fabricar cerca de 25 autos al año, cada uno con un costo aproximado de 78 mil 250 dólares (alrededor de 1.5 millones de pesos).
México no había tenido oportunidades tan altas de impactar en el mundo del automovilismo como ahora. El nuevo Vulh 05 y las hazañas de los pilotos mexicanos de la F1, Checo Pérez y Esteban Gutiérrez, están poniendo el nombre del país en alto dentro de esta área.